miércoles, 21 de enero de 2009

Mis Memorias XXI (Mirarse a los Ojos)

Sin duda que uno de los días más simbólicos para mi familia lo es el 31 de Diciembre de cada año. Puesto que ese día nos reunimos TODOS, los cinco hermanos, cada uno con sus respectivas familias en torno a nuestros padres, o sea, la familia –in extenso-- en nuestra casa paterna (Donde crecimos y nos formamos).

Aunque nos vemos con frecuencia muchas veces en todo el ano y en diferentes lugares, el 31 de Diciembre tiene características que hacen de la reunión algo especial; pero muchas veces la rutina lo hace imperceptible. Y es que ese día en particular marca el fin de un período y el inicio de uno nuevo…
Y para ese acontecimiento, a pesar de nuestras diferencias, siempre nos juntamos TODOS –la familia--. Aunque lo que voy a decir a continuación suene poético y hasta cursi para algunos, no deja de ser un hecho real: Esa especial noche de cada año, graba en nuestras mentes y en nuestros corazones unas lecciones simples y básicas pero que nos acompañaran de por vida:
* Mientras el reloj avanza hacia el final del año, a quienes ves a tu alrededor es a tus seres queridos (en ese momento ”están” incluso “los que ya no están”).
* Pero igualmente, una vez pasados los últimos segundos del año, de inmediato abrimos nuestros brazos y nuestro corazón para expresarles nuestros deseos y bendiciones para el nuevo año que recién comienza.

Este año en particular (31/12/2008), cuando nos disponíamos a realizar la acción de gracias previo a la cena, mi hermano mayor, en un acto poco usual, pidió a papá la palabra de apertura y con una sencilla y breve alocución nos invitó a que al abrazarnos y saludarnos nos “Miráramos a los Ojos”.

Aquellas palabras realmente me llegaron profundo,
y es que muchas veces, vivimos así, “Sin mirarnos a los Ojos”…
Y decimos “Felicidades”, o estrechamos manos y abrazamos a los demás como si esas formalidades y buenas maneras fueran suficientes para expresar nuestros sentimientos…
De que vale regalar un presente delicadamente envuelto si dentro esta vacío (como si el regalo fuera “la envoltura”).

Entendí que debemos volver al origen…
No se trata de repetir frases, ni de cumplir formalismos…
Sino que cuando deseamos algo a alguien, debemos procurar que ese deseo “llegue” real y efectivamente a esa persona…
de ahí la importancia de “Mirarse a los Ojos”…
Es como si estuviéramos agregando a lo dicho: “Sinceramente” (pero no con palabras sino con nuestro corazón).

Las palabras (lo que se dice, el tono,la forma en que se dice y los gestos con que se acompañe) no son mas que la envoltura, el regalo debe “verse” en nuestros ojos…
No se trata solamente de mirarle…
Si nuestro regalo es importante…
Si es Sincero…
Debe procurarse que esa persona “reciba” el regalo con los mismos medios (sus ojos)
De ahí la importancia de buscar la conección con la persona…
Deben “MIRARSE”.

Ejercicio:
Complete "Mirando a los Ojos" las siguientes expresiones:

“Dios te Bendiga” _____________________________

“Que Dios te dé Salud” _____________________________

“Que se cumplan tus Metas” _____________________________

“Vayan con Dios” _____________________________

“Que te Mejores” _____________________________

“Buenos Días” _____________________________


Repita diariamente y con frecuencia este pequeño ejercicio.(siéntase en la libertad de añadir otras expresiones a lista).


Mirarse a los Ojos.-
Autor : Reynaldo Cruz Rijo
Enero 2009

No hay comentarios: